Entre 1981 y 2019 Medellín estrechó sus lazos con 27 ciudades del mundo. Latinoamérica, Estados Unidos, España y Asia hacen parte de la lista de regiones y países con los que la ciudad busca proyectarse como destino turístico y tejer alianzas que le permitan aumentar la inversión extranjera directa y atraer recursos de cooperación internacional.
Desde hace 40 años la capital paisa emprendió una cruzada por estrechar lazos con urbes del mundo. Cambiará la estrategia. 5 memorandos y acuerdos de cooperación firmó la ciudad en 2020.
Concebida como una declaración bilateral para trabajar en una agenda conjunta, los hermanamientos juegan un papel crucial en la proyección internacional de la ciudad. ¿Cuál es el origen de esta figura?, ¿qué beneficios le trae al municipio? y ¿cuánta plata cuesta?
En diálogo con EL COLOMBIANO, varios actores que lideran esta tarea explicaron algunas de las claves para entender sus ventajas y desventajas.
Eleonora Betancur González, directora ejecutiva de la Agencia de Cooperación e Inversión de Medellín y el Área Metropolitana (ACI), explica que la estrategia de los hermanamientos es una herramienta que se remonta a la década de 1940, cuando finalizaba la Segunda Guerra Mundial; varias ciudades comenzaron a tejer alianzas y sobreponerse a la devastación del conflicto.
“Así como los Estados tienen mecanismos de intercambio, las ciudades también hemos reclamado esa necesidad de tener diálogo sin intermediación del Estado nacional. Un diálogo propio y particular entre ciudades”, explica Betancur.
Según agrega la directora, aunque a nivel global la estrategia data aproximadamente de 1947, en el caso de Medellín llegaría casi tres décadas y media después, en 1981.
Durante mayo de ese año, el entonces alcalde José Jaime Nicholls emitió el Decreto 297, con el que oficializó un hermanamiento con la ciudad de Fort Lauderdale, en Estados Unidos. Según aparece en los registros, aquel hermanamiento tuvo el objetivo de fortalecer la capacidad de los organismos de emergencias locales en la atención de incendios.
Sin embargo, habría que esperar hasta 1998, unos 27 años después, para que la ciudad retomara esta estrategia.
Proyección en el exterior
Los hermanamientos han sido claves para impulsar la estrategia de internacionalización de Medellín, una tarea con la que se busca atraer recursos para apoyar los programas sociales y fortalecer la economía regional.
El principal indicador empleado por la ACI Medellín para ilustrar el éxito de este trabajo es el retorno de la inversión, que compara el monto de recursos usados para promover esos relacionamientos con el monto de recursos atraídos.
En el caso de la inversión nacional y extranjera, por ejemplo, el año pasado la agencia calculó 381,1 millones de dólares atraídos; y en materia de cooperación, 4,9 millones de dólares.
Si se tiene en cuenta que la agencia tuvo un presupuesto cercano a los 5.300 millones de pesos el año pasado, los datos indican que, por cada peso invertido en esos relacionamientos, la ciudad recibió un retorno de 261 pesos en inversión externa.
En el caso de la cooperación internacional, por cada peso invertido, la ciudad recibió 7 pesos.
Sandra Howard Taylor, directora ejecutiva del Bureau de Medellín, considera que los hermanamientos facilitan el desarrollo de los territorios y potencian sectores de la economía en donde hay afinidades, como el turismo.
“En torno al turismo los hermanamientos pueden asociarse a nichos de mercado interesantes para nosotros. Esos lazos y afinidades culturales pueden derivar en un intercambio fluido de personas de un destino a otro”, señala Howard Taylor.
Según explica la directora del Bureau, los hermanamientos y otros convenios internacionales le permiten a la ciudad posicionarse como un destino turístico y de inversión relevante en otros países.
“Nos permiten mostrar una ciudad más progresista, innovadora y fértil para la generación de negocios. Eso genera confianza para los empresarios e inversionistas y un mejor conocimiento de la ciudad como destino”, agrega Howard.
Junto al turismo, también hay otros sectores de la economía y el sector público que se han visto beneficiados con esos relacionamientos.
Por ejemplo, según explica la directora de la ACI Medellín, uno de los casos de éxito lo constituye el hermanamiento firmado con la ciudad de Bilbao, en 1998.
A nivel institucional, uno de los legados de esa alianza fue el trabajo conjunto en temas con enfoque de género, principalmente en el fortalecimiento administrativo de la Secretaría de las Mujeres luego de su creación.
Así mismo, en materia de planeación urbana, el ayuntamiento de Bilbao le ha proporcionado asesoría a la ciudad para replicar intervenciones exitosas.
En este caso, otro ejemplo importante aparece en el premiado proyecto Parques del Río, que en varios componentes de su planeación fue influido por la experiencia de una intervención similar desarrollada en la río de Bilbao.
Aparte de España, otras experiencias exitosas incluyen becas gratuitas que han beneficiado a funcionarios para formarse en temas de gobierno y desarrollo local.
Además, en el caso del hermanamiento con la ciudad de Fort Lauderdale, que cumplirá 40 años, el cuerpo de bomberos de la ciudad aún recibe asesoría.
Aunque en términos generales la estrategia puede resultar muy positiva, Eleonora Betancur plantea que la tendencia de las principales ciudades del mundo consiste en priorizar relacionamientos que incluyan planes de trabajo más concretos.
Pese a que los hermanamientos manifiestan la intención de dos o más ciudades por trabajar conjuntamente, estas alianzas requieren ser cultivadas cuidadosamente y traducirse en planes de trabajo concretos, explica Betancur.
“La idea no es firmar por firmar, porque, a veces, se pueden quedar simplemente como intenciones de buena voluntad. Más que firmar, la tarea es hacer que los que ya existen tengan vida, seguimiento y refuerzo”,dice Betancur, quien agrega que hay otras figuras “menos elocuentes, pero más operativas”, como es el caso de los memorandos de entendimiento y los acuerdos de cooperación.
Aunque no se descarta la firma de nuevos hermanamientos durante los próximos años, Betancur anticipa que la prioridad de la ciudad será la de fortalecer los lazos que ya existen y buscar planes de trabajo con ciudades que se sintonicen con las metas del último plan de desarrollo.
Buscar alianzas para atraer firmas tecnológicas y encontrar oportunidades de educación en el marco de la estrategia del valle del software, serán algunas de las metas.
Las metas para el 2021
Durante este año, la ACI Medellín busca atraer más recursos para potenciar los programas sociales y fomentar la economía regional. En materia de cooperación internacional, la agencia buscará incentivar la llegada de 7,5 millones de dólares, y en materia de inversión extranjera, se buscará atraer 140 millones de dólares.
Según explicó Eleonora Betancur, directora de la ACI Medellín, el enfoque durante los próximos años será el de fortalecer alianzas a través de memorandos de entendimientos y acuerdos de cooperación. En 2020, la ciudad firmó por lo menos 5 convenios de este tipo.
Dentro del grupo de ciudades que se proyectan como las más atractivas, Betancur resaltó a Boston (Estados Unidos), con el que se pretende atraer negocios y potenciar la estrategia del valle del software.
UN NUEVO ENFOQUE
Eleonora Betancur, directora de la ACI Medellín, explica que, a pesar de su éxito, los hermanamientos se han convertido en una estrategia cuyo uso es menos frecuente entre ciudades del mundo. Criticados por no convertirse en planes de trabajo concretos, figuras como los memorandos de entendimiento y los acuerdos de cooperación se proyectan más atractivos. Según explicó, en el caso de Medellín, a diferencia de los hermanamientos, este tipo de nuevos acuerdos pueden estructurarse de forma más ágil, ya que no requieren la aprobación del Concejo. “En adelante, aunque no lo descartamos, el objetivo será no firmar tantos hermanamientos, sino acuerdos que vayan a planes de trabajo más prácticos”, planteó la directora Betancur, para quien estrechar lazos con ciudades que permitan alcanzar las metas del Plan de Desarrollo será la prioridad.
Nota elaborada por El Colombiano